jueves, 6 de marzo de 2014

Her

Título original: Her
Dirección: Spike Jonze
Producción: Megan Ellison
Guion: Spike Jonze
País(es): Estados Unidos
Año: 2013
Duración: 126 min
Protagonistas: Joaquin Phoenix, Amy Adams, Scarlett Johansson
Género: Drama, romance, ciencia ficción
Clasificación: R





Con cinco nominaciones y un Oscar. El Oscar fue muy mezquino con esta película. Le entregó el Oscar a mejor guión, porque sería demasiado grave de ocultar esa falta. Por otro lado el premio para Mejor Película tenía esta cinta motivos de sobra para merecerlo. Es diferente, es auténtica y es actual. Pero es que es más fácil y necesario negar la propia xenofobia que admitir las realidades actuales. Ese fue un premio que grita de todas las formas posibles “NO SOMOS RACISTAS”. También perdió el premio a mejor canción acá en cambio se lo arrebató el fanatismo insulso mueve masas al cual la Academia debe de obedecer para seguir siendo populares. Si esto no es digno de un Oscar, qué lo es. Es bella y perfecta. Representa muy bien el carácter de la película.


Mejor Banda Sonora, y mejor Dirección de Arte no se lo hubiera dado. Que es más yo no la hubiera nominado siquiera a Dirección de Arte. Es un buen trabajo. Toda la película es un buen trabajo. Pero la dirección de arte no es algo que exactamente destaque en ella. Y mejor banda sonora fue un premio bien entregado no podía competir a pesar de tener un buen trabajo.

Yendo a la cinta en sí y hablando de manera más general. Her es preciosa, exquisita, elegante, tan bien hecha. Te envuelve y te hace sentir y vivir. El guión y como mucho en la ciencia ficción te hace cuestionarte. Es tan actual, esa mirada a un futuro probable, resulta sincera y conmovedora es genuina. Es también muy preciosista, es tan cuidada y delicada. Spike Jonze sabía lo que hacía cuando se metió a hacer esto. No hay historia romántica tan bien trabajada.

Hablemos de Samantha. ¿Recuerdan a ‘el hombre bicentenario’? (una de mis películas y libro favoritos) Él quería ser humano y lucha por ello. Pero acá tenemos otra cosa distinta, es probablemente un fallo en la programación. Tan bien logrado el planteamiento de lo artificial que hasta la misma máquina no logra discernir si lo es o no. El final nos insinúa claramente que esta reacción que han tenido los sistemas operativos y sus propietarios es un fallo. Nosotros vemos la historia de Samantha y de Theodore, pero es algo que se repetía en muchos lugares. Comenzamos a comprender que algo va mal cuando lo que ‘siente’ Samantha no es exclusivo para Theodore. Y es donde vemos que este sistema en realidad no siente. En el hombre bicentenario, Andrew era único, pero en Her, Samantha es una falla más en la programación original.


Por otro lado esta cinta es un tratado sobre a dónde se están dirigiendo las relaciones inter-personales. Ahora todos llevan en su bolsillo un teléfono que no sirve solamente para lo que fue originalmente diseñado, realizar llamadas. Si no, que la mayoría lo que carga consigo es un Smartphone. Un aparato que de a poco va tomando, en la vida humana, más importancia que otras cosas, más importancia aún que las personas. Gente que olvida sus llaves en la oficina, pero nunca el Smartphone. Se dejan la tarjeta de crédito en la casa, pero nunca el Smartphone. ¿Y qué es lo que tienen? un sinfín de redes sociales de diferentes características. Las cuales se produjeron originalmente para establecer o fortalecer las relaciones reales. Pero que ahora se limitan a ello. ¿Cuántas personas conocen con la que twittean, a la que le likean estados de facebook, o comentan sus fotos en instagram. Pero que cuando los tienen en frente, no pueden entablar una conversación?


Se está estableciendo una falsa relación con el yo virtual, con el personaje que pretendemos ser en el mundo virtual. Y de esa realidad actual que muchos, todos, vivimos hay sólo un pequeño paso a encontrarnos en el mundo que propone ‘Her’. Y es que estamos tan pendientes de la maquinita, así portátil como la de Theodore, que no vemos a las personas reales que tenemos a nuestro alrededor. Theodore encuentra refugio en Samantha porque tenía problemas para relacionarse y con un sistema operativo que se acopla a su propia personalidad es todo más fácil, obviamente. La facilidad y comodidad en las cosas de la vida da pie a esta película. Como se lo critica la ex-esposa de Theodore. Es que es anti-natural crear algo que se acople a nosotros en lugar de madurar lo suficiente como para distinguir que el mundo real no es un cuento de hadas con finales felices.

Y ese mundo hacia el que caminamos no es sólo uno en que rechazamos la naturalidad de las relaciones inter-personales, tan necesarias para ayudarnos a crecer como ser humanos. Sino, también, es un encuentro con la comodidad una renuncia a nuestras propias responsabilidades, tanto así que no pueden escribir ni siquiera una propia nota. Y no es que prefieren tipearlos como ahora hay quienes rechazan el lápiz y el bolígrafo. Sino que se ahorran el pensar qué escribir. Podrán ser conmovedoras, pero ya no son sus palabras.

¿Caminamos a un mundo donde el sentir esté tan menospreciado?

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